La actual sacristía del ermitorio es el origen del actual ermitorio, pues se identifica con la primera capilla gótica, de piedra sillar y bóveda de crucería, donde todavía perdura el agujero por donde pasaba la cuerda de la campana primera, en honor a San Pablo. Aquí se conserva un valioso relicario del sepulcro del santo de la Basílica San Pablo Extramuros de Roma.